En HuX nos destacamos por ser expertos y apasionados en lo relacionado al liderazgo, pero muchas veces nos olvidamos de explicar lo más básico ¿Qué es el liderazgo y cuál es la base para que este sea exitoso?

Primero que todo, entendamos que al hablar de liderazgo nos referimos a las habilidades que desarrolla un individuo o grupo humano en cargos de poder y que son utilizadas para influir en la forma de ser y actuar de las personas a su cargo o de un grupo de trabajo determinado. Estas habilidades están enfocadas en lograr que el equipo o los individuos trabajen con entusiasmo hacia el logro de sus metas y objetivos. En palabras de Rallph M. Stogdill, autor de las «Teorías e Investigación del Liderazgo», este se puede definir como “El proceso de conducir las actividades de un grupo e influir sobre las conductas que estos desarrollen”.

Entendiendo esto, podemos inferir entonces que un liderazgo exitoso tiene que equilibrar el bienestar de los trabajadores con la obtención de resultados óptimos dentro de la empresa. Aquí es donde nos surge otra pregunta entonces ¿Cómo me acerco a este liderazgo exitoso?

Toda casa necesita cimentos y todo líder necesita pilares fuertes para construirse. Nosotros nos atrevemos a plantear que hay un trío fundamental que sostiene esta estructura: Propósito, Valores y Compromiso.

Propósito entendido como el valor primordial de la empresa ¿Para qué existe? ¿Qué le entrega a la sociedad? En otras palabras, lo que quiere decir es que las instituciones deben ser coherentes con su misión y visión; y que actúen siempre de acuerdo con ellos.

Aquí, el líder debe tener claro cuál es el propósito de la institución, el propósito de su propia área y transmitírselo a su equipo de forma adecuada, actuar bajo ellos y delinear las metas que debe conseguir su equipo remando hacia allá. Es el líder quien encarna el propósito de cara a su equipo.

Mientras que los valores nos hablan de la naturaleza de la empresa, sus principios profesionales y humanos que determinan las decisiones que se toman y orientan las acciones del negocio. A esto, se suma que estos valores también influyen a cómo se muestran frente a sus usuarios o clientes y, a la larga, quienes escogerán usar estos servicios. Esta es la esencia que determina el modo de liderar a cada equipo.

Así es como llegamos al último de los pilares: el compromiso. La manera en que la empresa y los trabajadores se relacionan entre ellos. De hecho, según el estudio “La lógica del Compromiso: Una palanca crítica para cambiar”, realizado por la consultora de talento y transformación digital Watch&Act, la buena gestión del compromiso en la empresa logra que el rendimiento de los trabajadores se eleve hasta el 300% y reduce el absentismo laboral hasta en un 37%. Es labor principalmente del líder lograr este compromiso, ya que es quien debe motivarlo y hacerlo sentir desafiado por su trabajo, mientras genera un ambiente laboral agradable y satisfactorio.

Ser un buen líder no es sencillo, por eso es importante revisar las bases de cómo se aborda la relación con los subalternos y si se está sosteniendo sobre estos fundamentos, que hacen que todo sea más fluido y equilibrado.